Últimamente llego demasiado tarde a todos lados :( Fuí hasta el comienzo para ver de que trataba. De chico viajaba mucho en tren, incluso nuestras vacaciones eran en Necochea, y el viaje por aquel entonces era bastaaaaaante largo. Había una magia especial en esos viajes, me encantaba mirar el campo a través de la ventanilla, y despertar con el amanecer; luego de una noche durmiendo salteado; y el brillo del sol en el horizonte. Eran tiempos sin preocupaciones, y en donde todo era sorprendente. Besos.
Ja! Bueno, ahora ya sabés de qué va el asunto... y cómo termina. Quizás no esté mal leer la nouvelle desde final hacia atrás, a ver qué efecto produce... A mí me gusta mucho viajar en tren, lástima que se hayan ido deteriorando tanto. Lindo tu recuerdo de infancia, besos.
Uy... en algunos comentarios creo haber sugerido que se acercaba el final... Escribí este relato hace muchos años; antes de publicarlo en el blog, obviamente, lo releí. Y de nuevo sentí que ese tenía que ser el final, que no debía cambiar ni agregar nada, que el viaje- ese al menos- había terminado.
Gracias por tu lectura atenta y entusiasta, Eleonora.
..." of our elaborate plans, the end" (qué temazo)
Tú lo has dicho: fin y comienzo de un nuevo viaje.
Me alegra que la hayas disfrutado, ojo. Fue extraño compartir algo escrito hace tiempo (que solo habían leído O. y algunas pocas personas más), y muy emocionante para mí. A pesar del tiempo transcurrido sigue siendo un texto que me representa, sigo reconociéndome en esa voz, en ese tono, en esa búsqueda. Por eso la decisión de compartirlo.
No! Un pajarito se ha posado sobre un poste, muy cerca de mí. Acicala su plumaje, observa a su alrededor: al andén, a la máquina, a mí (solo por un instante). Finalmente vuela...
Qué extraño...! Se percibe en el aire olor a fósforo.
Estoy sentado en el último asiento del primer vagón de un tren imaginario que se ha detenido, y veo la imagen de un camino hacia el infinito: El mejor final para un viaje de ensueño... o de una nouvelle para leer a la luz de la luna.
En el primer vagón?...No serías el maquinista?! ... :)
No sabés cuánto me conmueve tu comentario: que hayas subido al tren, que te hayas sumado al viaje, que contemples a Gulederodhe! (suerte la tuya...) me parece rarísimo y muy hermoso.
Gracias a vos, pasajero Sinhué. Un lujo tu compañía.
Un despertar, un "fin", pero no de la imaginación y la poesía. Sigamos entonces, caminando.
ResponderEliminarSalut, Betina.
Sí, parece que al fin despertó. Y que no camina sola.
EliminarSalut, Rob, y gracias por el acompañamiento.
Es como si perdurara el sueño...
ResponderEliminarO como si empezara otro... o como si la realidad se pareciera mucho a lo que se sueña o se desea.
EliminarÚltimamente llego demasiado tarde a todos lados :(
ResponderEliminarFuí hasta el comienzo para ver de que trataba.
De chico viajaba mucho en tren, incluso nuestras vacaciones eran en Necochea, y el viaje por aquel entonces era bastaaaaaante largo.
Había una magia especial en esos viajes, me encantaba mirar el campo a través de la ventanilla, y despertar con el amanecer; luego de una noche durmiendo salteado; y el brillo del sol en el horizonte.
Eran tiempos sin preocupaciones, y en donde todo era sorprendente.
Besos.
Ja! Bueno, ahora ya sabés de qué va el asunto... y cómo termina. Quizás no esté mal leer la nouvelle desde final hacia atrás, a ver qué efecto produce...
EliminarA mí me gusta mucho viajar en tren, lástima que se hayan ido deteriorando tanto.
Lindo tu recuerdo de infancia, besos.
No estaba prepara para el final de La luna... Me agarro desprevenida... Pero sigue el camino
ResponderEliminarUy... en algunos comentarios creo haber sugerido que se acercaba el final...
EliminarEscribí este relato hace muchos años; antes de publicarlo en el blog, obviamente, lo releí. Y de nuevo sentí que ese tenía que ser el final, que no debía cambiar ni agregar nada, que el viaje- ese al menos- había terminado.
Gracias por tu lectura atenta y entusiasta, Eleonora.
"beautyful friend
ResponderEliminarthe end..."
Pero el fin de la búsqueda y de la incertidumbre.
Comienza otro viaje.
Un placer leer la nouvelle. Originalidad y buenas inluencias, que no puedo descifrar del todo, y eso es lo bueno.
Un beso
..." of our elaborate plans, the end" (qué temazo)
EliminarTú lo has dicho: fin y comienzo de un nuevo viaje.
Me alegra que la hayas disfrutado, ojo. Fue extraño compartir algo escrito hace tiempo (que solo habían leído O. y algunas pocas personas más), y muy emocionante para mí. A pesar del tiempo transcurrido sigue siendo un texto que me representa, sigo reconociéndome en esa voz, en ese tono, en esa búsqueda. Por eso la decisión de compartirlo.
Un beso y gracias
Me despierto.
ResponderEliminarMiro por la ventanilla.
Estoy solo...
No! Un pajarito se ha posado sobre un poste, muy cerca de mí. Acicala su plumaje, observa a su alrededor: al andén, a la máquina, a mí (solo por un instante). Finalmente vuela...
Qué extraño...! Se percibe en el aire olor a fósforo.
Estoy sentado en el último asiento del primer vagón de un tren imaginario que se ha detenido, y veo la imagen de un camino hacia el infinito: El mejor final para un viaje de ensueño... o de una nouvelle para leer a la luz de la luna.
Gracias por el viaje, Betina!!
En el primer vagón?...No serías el maquinista?! ... :)
EliminarNo sabés cuánto me conmueve tu comentario: que hayas subido al tren, que te hayas sumado al viaje, que contemples a Gulederodhe! (suerte la tuya...) me parece rarísimo y muy hermoso.
Gracias a vos, pasajero Sinhué. Un lujo tu compañía.